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Amparo Matilda en sOpA’13 Congress

Amparo Matilda ya se encuentra en Malpartida de Cáceres, allí participará los próximos días 18, 19, 20 y 21 de septiembre como ponente en el I Congreso Internacional sobre Educación y Socialización del Patrimonio en el Medio Rural.

Desde su canal de SoundCloud Amparo nos explica como será su ponencia y comparte la alegría que siente por haber sido invitada a crear su particular lienzo de la comunicación en la primera edición de un congreso tan inusual y necesario como es este.


El lienzo de la comunicación

Amparo Matilda Escribano Cienfuegos se encuentra de viaje. Ha sido invitada a participar en el I Congreso Internacional sobre Educación y Socialización del Patrimonio en el Medio Rural, que tendrá los próximos días 18, 19, 20 y 21 de septiembre en Malpartida de Cáceres. Allí presentará un proyecto sobre el patrimonio intangible de las palabras y la materia sonora de los textos.

Para ella, que es pintora y poeta, las pinceladas y las palabras siempre han guardado una estrecha relación. Unos días antes de emprender el viaje, y acompañada por su colaboradora Cruz, Amparo estuvo de peregrinación por diferentes galerías y salas de exposición de Barcelona. Y justamente en uno de esos lugares fue donde decidió grabar esta reflexión sobre la palabra hablada.

Amparo Matilda os espera para compartir en su perfil de Twitter y en su canal en SoundCloud. Desde esos rincones sonoros y en vuestra compañía es como crea su particular lienzo de la comunicación.

En Twitter: @RasgandoColores

En SoundCloud: https://soundcloud.com/amparo_comparte_contigo


Darle cuerda al mundo y escuchar como suena

A lo largo de esta semana presentaremos nuestro proyecto de lectura en voz alta Textos para comer por el oído en el marco del I Congreso Internacional sobre Educación y Socialización del Patrimonio en el Medio Rural (18, 19, 20 y 21 de septiembre de 2013, Malpartida de Cáceres).

La nuestra es una iniciativa que invita a explorar los textos por el oído, un proyecto alrededor de la escucha, sobre el patrimonio intangible de las palabras y la materia sonora de la que están hechas.

Con motivo de nuestra participación en dicho congreso, pedí a Isabela Méndez, la actriz y escritora junto a quien hemos desarrollado las diferentes propuestas que configuran el proyecto, que escribiese una breve reflexión acerca de la escucha, de lo que para una actriz y escritora es el sonido de las palabras y del lenguaje. Ella ha ido un poquito más allá y nos confiesa en este texto como escucha el tiempo y el mundo, como siente su latido y lo descifra y recibe a través del oído. Isabela nos regala un billete, una invitación a darle cuerda al mundo.


Las texturas del tiempo
Ilustración de Juan Luis López Anaya
Técnica: Acuarela con tinta china 

TICTAC, TICTAC, TICTAC… por Isabela Méndez

Tictac, tictac, tictac, solíamos escuchar el paso del tiempo, el reloj parecía exprimir su propia esfera, sacar de ella segundos, agruparlos en minutos, almacenarlos en horas… El transcurrir de los días sonaba. Para mantener el reloj funcionando, debíamos darle cuerda. Era un momento mágico, en el que tras girar las minúsculas llaves, insuflábamos vida a aquel planeta de muñeca, o de pared.

Hoy ya casi no se ven relojes de ese tipo, ahora el tiempo parpadea en pantallas, sin percusión, sin campanas, sin cucos. Un tiempo mudo.

Yo me confieso enamorada del sonido y, por ende, del silencio, del entramado que generan para darnos pistas sobre el mundo. Quizás ese amor lo siento en parte porque soy actriz y sé la responsabilidad que recoge una palabra, el peso de un silencio, de las intenciones que cabalgan sobre las entonaciones a la hora de hablar, o de callar. Pero estoy segura de que hay otro aspecto que me ha convertido en devota del lenguaje hablado, y es el hecho de que nací con problemas severos de visión, razón por la cual, buena parte de la información que descifro a diario, la recibo por el oído.

La escucha es una herramienta básica de observación para una actriz, pues es del mundo real del que absorbo modismos, matices, acentos, atmósferas, que luego nutren a mis personajes y brindan un amplio abanico de opciones a mis narraciones de cuentos.

Disfruto como una niña de las conversaciones de la gente, del que canturrea por la calle, de las vendedoras, de los carniceros a la hora de hablar de sus productos, todo sirve para aprender y aprehender. Pero mientras yo me dedico a escuchar, la inmensa mayoría de la gente se dedica a ver. No solo la vida cotidiana sino también el recreo parecen entrar casi exclusivamente por los ojos. Hoy en día la multiplicidad de efectos visuales que ofrecen la televisión, el cine, los videojuegos y los videoclips de los cantantes,  dejan muy poco margen a la escucha. Hay tal saturación de estímulos para la vista que se está desaprendiendo a sentir y entender, a imaginar a partir del oído. Antes había espacio para los cuentos alrededor del fuego, para la radio, ahora es casi una obligación que te distraigan visualmente.

Sigo nadando contra corriente y tengo la alegría de ir acompañada, vamos en cardúmenes, y es que algunos continuamos apostando por la escucha. Por eso os animo a probar, a leer en voz alta, a sentir los sonidos de la calle, del bosque, de la plaza, del parque. Os invito a imaginar usando el oído, a crear vuestros propios lienzos y escenas,  partiendo de la variedad de sonidos que os arroja el mundo.

Volved al tictac, asomaos con el cuco para celebrar cantando que ha pasado una hora, trepad con las orejas a un campanario y haced una fiesta cuando repique.

¡Que suene el mundo! ¡Dadle cuerda!

NOTA:

El dibujo que acompaña esta reflexión pertenece al cuento-twitt de Isabela Méndez Las texturas del tiempo y es obra del ilustrador Juan Luis López Anaya, colaborador de este blog.


La musa arrugada

Con este cuento sonoro de Isabela Méndez presentamos la propuesta de lectura en voz alta «EL LATIDO DE LO ESCRITO» dentro del proyecto «Textos para comer por el oído»,en desarrollo en este blog.

Título del cuento: «La musa arrugada» © ®

Título del dibujo: «Entre arrugas» (Técnica mixta) © ®

Texto, dibujo y voz: Isabela Méndez

Grabación y diseño sonoro: Rolando Alonso

Música:
The Carol Of The Bells (George Winston)
Chopin Prelude Op. 28 No. 24 in D Minor (Ashkenazy plays)
Opening (Philip Glas)
Christina Dies (Piano Yanni)
Antarctica Echoes (Vangelis)
Allegro non molto (Vivaldi)

Este no es un producto comercial.

Forma parte de la propuesta de lectura en voz alta «EL LATIDO DE LO ESCRITO», dentro del Proyecto «TEXTOS PARA COMER POR EL OÍDO» en desarrollo en este blog.
Todos los derechos reservados © ®

 

El cuento:

LA MUSA ARRUGADA

Autora y voz: Isabela Méndez

Era tarde, el silencio aturdía.

Luego de increpar a su musa mirando al vacío, dijo en un tono contenido y repleto de rencor:

–¡Yo solo quería pintarte! Eres una musa vieja y desvencijada, ya no me sirves.

Acto seguido arrugó con todas sus fuerzas el boceto que estaba haciendo y lo echó en el cubo de la basura.

–Yo tengo los pinceles, el agua, el carboncillo, la tinta, los papeles, el lienzo… ¡Qué te habrás creído! Si mi noche es larga, más larga será la tuya, musa egoísta que me dejas en sombras.

Transcurridas unas horas, en medio del sueño la mujer escuchó ruidos. Estuvo aterida entre las sábanas, el miedo no le permitía levantarse. Tras esperar elásticos minutos en la oscuridad, de nuevo se quedó dormida.

Al despuntar el alba se levantó cautelosa, empuñó unas tijeras a modo de espada y fue caminando hasta el taller. Cuando llegó, observó que el papel en el que había querido plasmar a su musa, a la fuerza, no solo estaba extendido en el suelo, sino que además se había llenado de colores.

La mujer se acercó con lágrimas en los ojos. La figura del boceto estaba llena de flores y frutos, despedía un aroma penetrante y un cántico que sonaba como una cascada.

–¡Perdóname! por favor, perdóname –dijo la mujer arrepentida.

–Yo era tu musa, no tu esclava. Florezco cuando se trabaja con tesón y cariño, cuando hay inspiración real o sencillamente cuando se me deja tranquila. Me marcho a otro jardín de ideas, en el que sea libre.

La musa se separó del papel y se fue caminando con sus muchas raíces.

La mujer agarró la hoja, ahora blanca, y lloró sobre las huellas que habían dejado las arrugas. El desánimo pobló los rincones de su casa.
Transcurrieron días llenos de largos silencios, solo rotos por sus lamentos.

Una tarde mientras cocinaba, el aroma de la albahaca mezclada con la pimienta y el aceite de oliva, le hizo recordar las tardes en que la abuela preparaba el aliño de su plato favorito al compás de unas estrofas, que al principio tímidamente y luego con más énfasis, la mujer se puso a cantar:

Los abrazos de mi hombre

huelen a pimiento

y a brotes de albahaca fresca

su boca y su aliento.

Y cuando mi hombre me besa

tiene un olorcillo

a romero con anís

y hojas de tomillo.

Las caricias de mi hombre

huelen a jazmín

al tocar todo mi cuerpo

de principio a fin.

Y al rozarme con los labios

sobre la cintura

sale un aroma a frutilla

hecha en confitura.

Al ritmo de la melodía, la mujer se puso a bailar y una ola de alegría le invadió. Sintió deseos de plasmar la cara de la abuela en un lienzo, así que dejó la comida cociéndose a fuego lento y con máximo respeto buscó los pinceles y los pigmentos.

Reconoció sus utensilios uno a uno, y con las cerdas de un pincel seco recorrió el lienzo, como haciéndole cosquillas. Dejó que la mano transitara sinuosa sobre la superficie, que el tiempo se amalgamara con el espacio, que su mente paseara equina, dejando las imágenes libres, como crines que mueve el aire. Luego mojó el pincel en pigmento y emprendió el camino conocido y siempre imprevisto de crear.

Al rato de estar pintando, escuchó un ligero sonido y pudo ver que en un hoyito de su paleta, una musa, nacía tímidamente.


La nana de la luna

Si algo nos gusta hacer en este trapecio son piruetas de suma de talentos.

Hoy el vuelo en la red viene en forma de nana: unos dulces cuartetos rimados del poeta Fernando Gessa a los que se ha sumado el trazo fesco y libre del ilustrador Juan Luis López Anaya.

Fernando, gracias por brindarnos la musicalidad de tu nana. Y a ti, Juanlu, por estar siempre dispuesto a explorar nuevos retos.

Nana de la luna

La nana de la luna

Del poema: Fernando Gessa ©
Del dibujo: Juan Luis López Anaya ©

El dibujo de Juan Luis López Anaya ha sido realizado de forma expresa y como colaboración a petición de este blog para ilustrar el poema La nana de la luna del poeta Fernando Gessa.

LUGARES DONDE HABITAN los poemas de FERNANDO GESSA y los dibujos de JUAN LUIS LÓPEZ ANAYA:

Podéis encontrar a Fernando en su blog: Mesa para uno, donde os espera para compartir y pasar un rato en buena compañía.

A Juan Luis lo encontraréis con sus Didibujos, donde anda lleno de dibujos, que le nacen cuando el corazón lo desea o las letras de sus amigos le traen personajes a las manos…


Palabra y silencio

Cuando este trapecio alzó el vuelo, hace algo más de un año, una idea venía una y otra a vez a mi mente: «¿Cómo podría articular una propuesta sobre lectura en voz alta y escucha que integrase pincelada, sonido y texto

Comencé a desarrollar la idea junto a Isabela y poco a poco fue tomando forma de proyecto. Hoy os lo presentamos. Lo hemos llamado «Porque en un twitt también cabe todo el arte». Con él buscamos estimular la escucha y la creatividad.

El primer twitt ilustrado y sonoro que os presentamos habla justamente de eso, de la palabra y el silencio.

La grabación, vídeo y diseño sonoro llevan la firma de Rolando Alonso.

Texto, pincelada y voz de Isabela Méndez.


Conjugación de un beso

«Un beso siempre se conjuga en presente«, Amparo Matilda Escribano Cienfuegos

«Conjugación de un beso»

en la voz de Amparo Matilda Escribano Cienfuegos

Conjugación de un beso

NOTA PARA EL LECTOR y OYENTE:

El rincón sonoro de Amparo, donde te espera para compartir, se encuentra en dos lugares:

En Twitter, en @RasgandoColores

En SoundCloudhttps://soundcloud.com/amparo_comparte_contigo

¡Feliz domingo!


El rincón sonoro de Amparo Matilda Escribano Cienfuegos

Creo firmemente que cuando las palabras son dichas en voz alta, recitadas, susurradas o cantadas actúan como si fuesen algo muy parecido a un influjo. ¡Qué asombrosas y extrañas son las palabras! Poetas, escritores, actores, músicos y cantantes, seguro, saben mucho de ello.

Hoy os invito a visitar el rincón sonoro de Amparo Matilda Escribano Cienfuegos, una artista de los pinceles para quien uno de los lienzos más importantes es el de la imaginación.

El rincón sonoro de Amparo se encuentra en dos lugares:

En Twitter: @RasgandoColores

En SoundCloud:  https://soundcloud.com/amparo_comparte_contigo

¡Bienvenida la participación!


Belleza cotidiana

amanecer mediterráneo

Amanecer en el Mediterráneo
Verano 2013
Fotografía: Maite Mena

Hoy amanecí con la sorpresa de recibir una fotografía en mi móvil. Al verla supe que era mucho más que una imagen, lo que me enviaban era un instante de belleza, un momento cotidiano, una maravilla que ocurre todos los días. Y esta, además, tiene lugar muy cerquita de mi casa.

Imposible no compartirla en mi blog. Más, cuando la artífice de esta espectacular fotografía es una amiga muy querida.

Maite, te lanzo un guante, ¿lo coges?… ¿Qué te parece si empiezas a construir un álbum sobre momentos cotidianos y lo subimos a mi trapecio de tinta? Estoy segura de que sería un proyecto de altos vuelos.

PS: Hago extensivo este lanzamiento de guante a todos aquellos seguidores de este espacio que a diario lanzan disparos fotográficos. ¡En este trapecio impulsamos la belleza que nos rodea!

NOTA para Maite: Gracias por compartir siempre tus momentos con los demás. Eres un sol de persona.


Café, anís y canela: te invitamos a probar nuestra fragancia de verano

Como los mejores perfumistas, Isabela Méndez envasa sus versos e historias en frascos pequeños. Al abrirlos descubres composiciones sonoras y olfativas, una poesía y prosa hiperbreve que evoca los sentidos.

Te invitamos a probar nuestra fragancia de verano: los twitts ilustrados de Isabela Méndez, bañados en el sabor del café y el dulzor del anís y el aroma de la canela.

AVISO:

Las fragancias orgánicas que llevan las palabras e imágenes de Isabela Méndez son altamente adictivas, sin embargo son intensamente indicadas para la vida diaria.

máscara café

Bañada en café, anís y canela
Tinte de café sobre recorte.
© Del texto, dibujo y fotografía: Isabela Méndez